En momentos de pandemia, el crecimiento del e-commerce generó un incremento en la demanda por almacenes de última milla o “dark stores” en Lima.
Actualmente, empresas grandes de comercio y operadores logísticos colocan como primera solución implementar almacenes de última milla. Ello con la finalidad de reducir tiempos de entrega vía e-commerce en Lima.
Las demandas de implementación de almacenes en espacios como Chorrillos, Surquillo y Carabayllo han incrementado (espacios cercanos a Lima Metropolitana). De la misma manera, existen muchos operadores logísticos que realizan alianzas estratégicas con centros comerciales para así reducir los mismos costos y poder generar mayor eficiencia en los envíos con mayor demanda (locales).
La meta de este año es poder acelerar las entregas y con ello acercar la cadena logística al consumidor final, en comparación a la meta del 2020: descongestionar los procesos en la última milla.
Concentración en Lima Metropolitana
Las empresas al encontrar la necesidad y facilidad de entrega están optando por almacenes más pequeños conocidos como almacenes de última milla en localidades con mayor concentración de pedidos por internet. De esta forma, la salida de compras online ya no se centrará en los almacenes centrales al sur de Lima.
“A diferencia de los centrales, estos tienen una altura máxima de cuatro metros para que el picking y el packing sean más rápidos”, explica José Antonio Vallejo, presidente de Vallejo Group que utiliza estos almacenes.
De igual manera, se muestran alianzas con malls para utilizar sus estacionamientos como centro de distribución.
Entregas «flash»
Mayor puntos de distribución reducirán los tiempos de entrega. El año pasado, el exponencial crecimiento del e-commerce excedió la capacidad logística de las empresas, lo que ocasionó demoras en las entregas con un mínimo de 12 horas (next day). En la actualidad, la apuesta es por envíos de 30 minutos a 90 minutos (express), 4 horas (same day) o hasta 12 horas (next day).
Un factor detonante y principal causa del incremento del uso de los e-commerce fue la pandemia y la cuarentena. Con la finalidad de poder satisfacer las necesidades de los clientes a tiempo, se ha implementado los almacenes de última milla.
Aumento de inversiones
Las inversiones para almacenes logísticos de última milla seguirán creciendo en el 2021. “El negocio logístico se ha vuelto a poner en el mapa del mercado inmobiliario y la mayoría de players están buscando participar”, comentó Sebastián Carrillo, líder del área de corretaje de Cushman & Wakefield Perú.
En esta pandemia el activo con menos cambios en las tarifas de alquiler han sido estos activos logísticos de última milla. La búsqueda de activos cercanos a la ciudad seguiría siendo productiva en la medida en que algunos sectores tardan en activarse.
Fuente: Semana Económica